Incomunicados, perdidos, solos...

Mis neuronas funcionan a su libre albedrío, sinapsis de conexiones ora defectuosas ora aleatorias. Relacionan ideas de forma peregrina, cuando no directamente peculiar. Por ello hablaré breve y tangencialmente de dos temas aparentemente sin conexión: el metro y el Amazonas.

A veces se ejemplifica el metro como muestra de la incomunicación en las urbes. Cada uno, miles de viajeros, absorto en sus problemas, concentrado en su música portátil, leyendo apuntes, prensa, ficción. Miles de microcósmos a escasos centímetros unos de otros. Tan cerca y a la vez tan lejos de los demás.

Antes del ipod y la prensa gratuita tampoco se formaban tertulias en los vagones. ¿Por qué nos dan la matraca ahora con la "incomunicación"? Salvo cuando no tengo más remedio (trabajo, obligaciones sociales de diverso tipo) yo prefiero comunicarme antes con personas afines que con desconocidos. Bueno, soy introvertido, nunca pretendí ser perfecto.

Hoy he visto en la tele unas declaraciones de Sydney Possuelo, especialista en pueblos indígenas aislados brasileño. Existen cerca de 30 tribus, situadas preferentemente en las fronteras con otros países sudamericanos, que nunca han tenido contacto con esa entelequia que conocemos con el apodo de "civilización". Él defiende su derecho a proseguir en su estado actual de aislamiento. Otros, seguro que se creen buenos samaritanos, opinan que no pueden quedarse al margen de los "avances de la civilización".

¿Realmente sería una ventaja para esos grupos de varias docenas de personas perder su forma tradicional de vida? ¿A cambio de qué? ¿De poder ver los partidos de la canarinha vía satélite? ¿De convertirse en objeto de estudio para académicos? ¿De asumir nuestros roles civilizados? No dudo que sus condiciones de vida no sean un lecho de rosas, pero han sobrevivido hasta hoy. ¿Sobrevivirán mañana si se despojan de su esencia y asumen unos hábitos que ni son los suyos ni jamás acabarán aceptando o comprendiendo del todo? Bueno, los humanos tenemos una asombrosa capacidad de adaptación... pero ya no tendrán nada que ver con lo que fueron hasta entonces.

La soledad tiene mala prensa. Nosotros al menos podemos elegir. Conocemos el precio y pasamos por caja. Esas tribus, en cambio, están a expensas de lo que otros decidan por ellos. Que tengan suerte. De esta jaula dorada no podrán escapar.

Banda sonora

10 opinantes:

Anónimo dijo...

Otras tribus habria que civilizar antes...

o

lástima que no sean ellos los que vayan a imponer su forma de vida...

Anónimo dijo...

llàstima que no sigui jo un d'aquests indigenas, que bé que estaríem sense tanta superficialitat i egoisme. Estic per anar-me al brasil i fer una tribu mig perduda

Anónimo dijo...

Estic per anar-me al brasil i fer una tribu mig perduda
Si no fos pels insectes....

"Món civilitat"...és evident que l'expresió s'utilitza amb molta lleugeresa...

Doncs jo agraeixo profundament la incomunicació al metro. Les meves experiències conversadores en un vagó han sigut sempre contra la meva voluntat i ..com ho diria....En el millor dels casos un guiri demanant per una parada. I a partir d'aquí... (sobretot ara que el metro obre tota la nit el dissabte....)

Si és el que jo dic...Està bé conversar...si tens alguna cosa interessant a dir. Si no...és mooolt bonic compartir silencis!

Anónimo dijo...

Acolostico, tenemos interné, cohetes espaciales, contaminación a raudales, violencia sectaria, pero semos más civilizados que naide.

Qué bonito dr lecciones a los demás cuando nosotros tenemos mucho que aprender y, sobre todo, corregir.

Anónimo dijo...

que bé que estaríem sense tanta superficialitat i egoisme
Doncs sí, peró, com l'Anna, no m'agraden el insectes ;-)

El problema també és què m'he fet a les comoditats occidentals i no m'atrau ni tan sols dormir al terra.

Anónimo dijo...

Està bé conversar...si tens alguna cosa interessant a dir. Si no...és mooolt bonic compartir silencis!
Completament d'acord, Anna. No cal afegir res.

A més, quan vaig a la feina estic mig adormit i no sóc gens sociable. Quan torno de la feina estic cansat i no sóc gens
sociable.

Ai, ai, ai, què tinc un problema de sociabilitat...

Anónimo dijo...

Ai, ai, ai, què tinc un problema de sociabilitat..
Home...potser és un problema de cansament...pel que dius...
Ser sociable és molt cansat, de vegades... :-)

Anónimo dijo...

Sí, de cansament també ;-) però admeto què em fa una mica de pal enrollar-me amb desconeguts. Soc introvertit, ja ho he dit.

Mantenir converses mínimament interesants (i no com el tópic de parlar del temps amb els veins a l'ascensor, uf), ja no dic inteligents o profundes (aquestes encara cansen més per l'esforç), és complicat. Però quan troves algú amb qui pots i val la pena, guau, podem aparcar per uns moments el magnífic silenci.

Juanma dijo...

Mis últimos casos de conversación en trasportes colectivos fueron con borrachos excesivamente comunicativos o brasas necesitados de algo más que una conversación casual de cuatro paradas de metro. Esa es la pena: que, para alguien que te da conversación, sea alguien con quien no te apetece hablar en absoluto o a quien, por desgracia, no vas a poder ayudar mucho más, tan sólo seguirle la corriente durante cuatro paradas de metro.

Por lo demás, no tengo iPod y no suelo leer prensa gratuita: en el transporte público siempre he ido leyendo o durmiendo. Lo cual supongo que me resta posibilidades de entablar conversación.

Anónimo dijo...

no tengo iPod y no suelo leer prensa gratuita
Con musiquita el viaje es más llevadero. Y en la prensa gratuita sale cada cosa que hasta te ríes antes de llegar al trabajo.

Aunque me veas con los ojos abiertos, en el fondo voy adormilao, como un zombi ;-)