Nosotros no somos la "sociedad civil"

¿Cuántas veces hemos oído o leído eso de "sociedad civil"? ¿Y qué demonios es? Un término con el que se pretende identificar a ciertos sectores con una presunta influencia, con cierta ascendencia sobre los nucleos de poder, o cuya opinión puede ser tenida en cuenta por estos por su relevancia social. Posiblemente no sea exactamente así, tal vez no se parezca mucho a la realidad. Lo que es indudable que "sociedad civil" no somos los mindundis como yo.

Con motivo de los fastos de la Diada, concretamente la víspera, se celebró una merendola en el parque de la Ciutadella. Se invitaron a 2.500 miembros de esa sociedad civil a atiborrarse de canapés pagados con nuestros impuestos. Qué mejor que al aire libre, para que esos miles de chupópteros privilegiados pudieran comer sin estrecheces. Claro que eso obligó a desalojar el parque de ciudadanos molestos y anónimos, gente vulgar que podía deslucir la velada, incomodar a los invitados, escandalizarse de la sinvergonzonería con las que unos cuantos se ponen las botas a costa de todos.

Artistas (o sea, cantantes, actores...), empresarios, profesionales liberales relevantes, representantes de entidades de todo tipo, académicos, sindicalistas, por supuesto políticos, etc. Es decir, personas todas ellas muy bien colocadas, acostumbradas en muchos casos a tratar con más o menos cercanía con el poder o sus satélites, y en otros tantos expertos en arrimarse al sol que más calienta. ¿A qué sociedad representan estos? ¿A nosotros, a todos, o más bien a sus propios intereses y los de sus colectivos?

Al poder político le gusta más esta sociedad civil. Periódicamente les tiran huesos (o canapés) y toleran que algunos ladren de vez en cuando para guardar las formas. Eso es mejor que soportar la inmersión en la dura realidad por parte de la gente de a pie, algunos deslenguados que serían capaces de cantarles las cuarenta a la cara, siempre con la pregunta incómoda en la punta de la lengua, incapaces de tragarse sus trolas promesas por enésima vez, personas que -en definitiva- lo único que piden son más hechos y menos palabras (como rezaba cierto eslogan electoral).

Cuando los mossos antidisturbios tienen que echar de un parque a familias con niños para que unos cuantos señoritingos se solacen a sus anchas, me da que vivimos en una democracia de opereta bufa. ¡Qué bien estamos! Tenemos unos grandes políticos que velan por nuestro bien y una respetada sociedad civil que habla en nuestro nombre con total conocimiento de causa. Dios los cría y ellos se juntan... en contra nuestra.

(Banda sonora: Golden earring - Twilight zone)

5 opinantes:

Anónimo dijo...

la sociedad es la culpable, que sociedad no hay más que una, y a ti te encontré en la calle...

no nos queda más qeu vivir fuera de la ley, ya saben, delinquiendo...

Pero vamos, si o soy militar ni político, ni pertenezco a la sociedad civil...

Anónimo dijo...

Somos la Santísima Trinidá: contribuyentes-votantes-consumidores. No nos quieren para otra cosa.

Replicant dijo...

Ninguno de nuestros estimados representantes se han negado a utilizar el coche oficial...por muy ecológicos y "sostenibles" que dicen ser...Ahi va una perla...

Replicant dijo...

Ninguno de nuestros estimados representantes se han negado a utilizar el coche oficial...por muy ecológicos y "sostenibles" que dicen ser...Ahi va una perla...

Replicant dijo...

Ninguno de nuestros estimados representantes se han negado a utilizar el coche oficial...por muy ecológicos y "sostenibles" que dicen ser...Ahi va una perla...